De esto obtuvimos que el hall, era un punto articulador dentro de la facultad, poseía elementos de transición de un lugar amplio a uno mucho más configurado, que tenía una tensión transversal, que a su vez comprimía. Uno de los principales problemas es que se superponían las actividades y no habían límites claramente definidos.
A partir de esto, llegamos a la conclusión que lo que había que potenciar era el espacio central, volviéndolo aún más comprimido, para así convertirse en un espacio mucho direccionador de flujos, y eliminar los espacios de permanencia que interrumpían con el paso de los usuarios.
El problema que tuvimos con esto, es que a pesar de que funcionaba espacialmente, no era autosoportante por lo que no era posible construirlo a escala 1:1.
0 comentarios:
Publicar un comentario